HACIA LAS SOCIEDADES DEL CONOCIMIENTO .
El dominio del conocimiento puede ir acompañado de un cúmulo importante de
desigualdades, exclusiones y luchas sociales. Durante mucho tiempo el conocimiento fue acaparado por
círculos de sabios o iniciados. El principio rector de esas sociedades del conocimiento reservado era el
secreto. Desde el Siglo de las Luces, los progresos de la exigencia democrática –basada en un principio de
apertura y en la lenta aparición de un ámbito público del conocimiento– permitieron la difusión de las ideas
de universalidad, libertad e igualdad. Esta evolución histórica fue unida a la propagación de conocimientos
por intermedio del libro, y luego de la imprenta, y también a la difusión de una educación para todos en
la escuela y la universidad. Este ideal de conseguir un ámbito público del conocimiento, que es un elemento
fundamental de la UNESCO y su Constitución, no se puede considerar como un logro definitivo.
↬Una sociedad del conocimiento es una sociedad que se nutre de sus diversidades y capacidades
La noción de sociedad de la información se basa en los progresos tecnológicos. En cambio, el concepto
de sociedades del conocimiento comprende dimensiones sociales, éticas y políticas mucho más vastas. El
hecho de que nos refiramos a sociedades, en plural, no se debe al azar, sino a la intención de rechazar la
unicidad de un modelo “listo para su uso” que no tenga suficientemente en cuenta la diversidad cultural
y lingüística, único elemento que nos permite a todos reconocernos en los cambios que se están produciendo
actualmente.La importancia de la educación y del espíritu crítico pone de relieve que, en la tarea de construir
auténticas sociedades del conocimiento, las nuevas posibilidades ofrecidas por Internet o los instrumentos
multimedia no deben hacer que nos desinteresemos por otros instrumentos auténticos del conocimiento como la
prensa, la radio, la televisión y, sobre todo, la escuela.
http://www.medigraphic.com/pdfs/mediciego/mdc-2014/mdc141j.pdf
↬La difusión de las tecnologías de la información y la comunicación abre nuevas posibilidades al desarrollo
La coincidencia del auge de Internet, así como de la telefonía móvil y las tecnologías digitales, con la tercera
revolución industria, el papel que han desempeñado esas tecnologías en el desarrollo económico mediante la difusión de las innovaciones y los aumentos de productividad posibilitados por éstas y en el
desarrollo humano. El desarrollo de las nuevas tecnologías se consideró una panacea que ofrecía
soluciones a muchos problemas persistentes, por ejemplo la educación y la salud de los más desfavorecidos
en los Estados Unidos, el choque industrial y monetario en Japón o el desempleo estructural en Europa. La
perspectiva de un “salto tecnológico” (leapfrogging) también pareció sumamente atractiva para los países en
desarrollo, ya que emitió la hipótesis de que era posible saltarse algunas etapas del desarrollo industrial
adoptando directamente las tecnologías más avanzadas y beneficiándose así de su inmenso potencial.
↬Las sociedades del conocimiento no se reducen a la sociedad de la información
El nacimiento de una sociedad mundial de la información como consecuencia de la revolución de las nuevas
tecnologías no debe hacernos perder de vista que se trata sólo de un instrumento para la realización de auténticas
sociedades del conocimiento. El desarrollo de las redes no puede de por sí solo sentar las bases de la sociedad
del conocimiento.
La información es efectivamente un instrumento del conocimiento, pero no es el conocimiento en sí.4 La
información, que nace del deseo de intercambiar los conocimientos y hacer más eficaz su transmisión, es una
forma fija y estabilizada de éstos que depende del tiempo y de su usuario: una noticia es “fresca” o no lo es. La
información es en potencia una mercancía que se compra y vende en un mercado y cuya economía se basa en la
rareza, mientras que un conocimiento –pese a determinadas limitaciones: secreto de Estado y formas tradicionales
de conocimientos esotéricos, por ejemplo– pertenece legítimamente a cualquier mente razonable, sin que ello
contradiga la necesidad de proteger la propiedad intelectual. La excesiva importancia concedida a las
informaciones con respecto a los conocimientos pone de manifiesto hasta qué punto nuestra relación con el saber
se ha visto considerablemente modificada por la difusión de los modelos de economía del conocimiento.
↬Los peligros de una mercantilización excesiva de los conocimientos
Las prometedoras perspectivas económicas y sociales que parecía encerrar la sociedad de la información
–ya se trate del pleno empleo, de la “nueva economía” o del “boom” de la competitividad– han dejado paso a toda
una serie de dudas acerca de los límites de la “era de la información”. Algunos expertos han señalado que
nuestras sociedades no sólo distan mucho de confirmar la hipótesis de una presunta “desmaterialización”, sino
que se hallan inmersas en un proceso de “hiperindustrialización” porque el propio conocimiento se ha
“mercantilizado” en forma de informaciones intercambiables y codificables.
información de suma importancia Lic. felicitaciones
ResponderBorrarExcelente Gracias por la Información!😉👏
ResponderBorrarMuy bien gracias por la información!!
ResponderBorrarExcelente!! Muy buena información Dali 😉
ResponderBorrarMuy bien amiga, buena información😉
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